Llevo semanas buscando el momento más adecuado para comentar los cambios que me han llevado a comenzar una nueva etapa en mi vida. Respiro profundamente y te lo cuento.

Musiembarazo nueva etapa en mi vida

Desde hace un tiempo cabeza y cuerpo me pedían realizar cambios, comenzar una nueva etapa en mi vida. Sólo necesitaba encontrar el momento adecuado. Y ese momento llegó. En el año 2018 encontré a la persona con la que quería compartir mi vida. Es una persona muy grande, en todos los sentidos (los que le conocéis lo sabéis): físicamente de mi gusto, tiene mucho sentido del humor, es empático, puedes mantener conversaciones interesantes con él y se adapta a cualquier situación.  Coincidimos en lo fundamental y nos diferenciamos en lo necesario.

Mamá naturaleza llamó a la puerta, y como mi casa ya estaba al fin preparada, le abrí: ¡estoy embarazada! Feliz porque va todo bien, tomando la vida con calma, disfrutando de cada momento, de cada movimiento y cambio que se produce en mi cuerpo. Esta nueva etapa en mi vida está siendo maravillosa, sólo perturbada en ciertos momentos por la situación que nos ha tocado vivir a todos con el COVID-19. Toda precaución es poca, y aquí estamos: cuidándonos lo máximo posible y disfrutando a tope cada momento. El llamado «efecto Mozart» ya me acompaña a diario

Por otro lado, comparto pocos vídeos de mi alumnado porque estoy de baja laboral. Como por suerte, de momento me encuentro bastante bien, he aprovechado para inscribirme en varios cursos organizados por Ana Quílez y Estevao Marques, dos grandes profesores de música. Su currículum es envidiable: han recibido formación en la metodología Dalcroze, Willems, Kodaly, Orff… Por eso, el curso al que asistí en Soria, «Ritmo y movimiento», enriquecido con dichas metodologías, cambió definitivamente mi percepción de la metodología musical.

Además, sigo de cerca el trabajo de otros docentes musicales que son referencia a nivel nacional. Su vocación, igual que en mi caso, les lleva a compartir su trabajo de forma desinteresada, y eso siempre es de agradecer. Como me decían algunos profes de Musicología, copia de los mejores y adapta el material el función de tus gustos y necesidades. Algo similar he hecho en el siguiente vídeo, adaptando la canción «Fumaça», de Estevao y Ana, al gallego:

 

Y ahí continúo, siempre con calma y respetando el ritmo que marcan mi cuerpo y mi mente. Todos ellos me sirven de inspiración para las actividades que os pueda enseñar durante estos meses y cuando retome el trabajo.